Algunas ideas para hacerle un regalo a nuestro violín

Por si no os habiais enterado, el pasado 13 de diciembre fue el «Día mundial del violín» #WorldViolinDay, (lo que quiera que signifique eso) así que entre eso y que se acercan los días del consumismo desbocado, quizás es buen momento de pensar en comprarle algún regalo para nuestro compañero. Y es que nada nos gusta más que mimar al pequeño chillón.

Atriles para iPad/Tablet

Es seguro que ultimamente, y cada vez más, has estado sustituyendo en tu atril los montones de papeles impresos, fotocopias o cuadernillos por simplemente, una tablet o incluso, para los más reacios a la tecnología, o con menos posibilidades económicas, un móvil. Y es que realmente las ventajas de tener todo el material metido en un único dispositivo son demasiado tentadoras, aunque hay que decir que también hay desventajas, como el tamaño más pequeño, la imposibilidad de tener doble página o cómo pasar de página.

Además, colocar el iPad u otra tablet sobre un atril diseñado para papel es peligroso, y personalmente ya he sufrido más de una caída al suelo del aparato, afortunadamente sin consecuencias graves.

Para evitar este y otros problemas tenemos los soportes para tablet, en los que podemos encajar con seguridad y firmeza nuestro dispositivo.

En el mercado hay ya varios modelos, incluso con versiones para teléfono móvil, entre los que podéis escoger el que mejor se adapte a vuestras necesidades/presupuesto. Para ilustrarlo os muestro este soporte de la casa Konig & Meyer que Luthier Vidal ofrece en su web.

Humidificadores

Los que vivimos en lugares habitualmente muy secos como Madrid, debemos tener cuidado con la excesiva sequedad del aire. También con los cambios bruscos de temperatura y humedad (por ejemplo, llegar a casa en un día frío y lluvioso y que esté la calefacción en el interior muy fuerte). Para ayudar a mantener un nivel constante es muy aconsejable disponer de humidificadores que compensen la excesiva sequedad, cuando está sucede.

Entre estos dispositivos, el dampit era un recurso tradicional, tiene la ventaja de que no se gasta, simplemente hay que recargarlo en agua de vez en cuando, pero con la desventaja de que es un poco engorroso, hay que secarlo bien por fuera antes de usarlo, introducirlo en las efes, etc.

Más recientemente ha aparecido un nuevo sistema que es mucho más limpio, sencillo y práctico aunque tiene la desventaja de que cuando se agota hay que volver a comprar recambios, ya que utiliza una especie de gel para mantener un entorno de humedad constante; cuando es baja desprende vapor de agua, mientras que cuando es excesiva, la absorbe. Lo podéis encontrar en Qarbonia.

Afinadores de pinza

Uno de los problemas habituales que tenemos con los afinadores electrónicos normales, incluidas las apps para móvil, es que si hay ruido ambiente (digamos el resto de la orquesta, o el resto de la banda) resulta complicado obtener una lectura fiable de los sonidos del violín.

Para solucionar esto existen los afinadores de pinza que registran el sonido de forma táctil, por lo que no les afecta el sonido ambiental.

En esta ocasión os enseño dos modelos: el que tengo yo, un modelo accesible y funcional, y otro de más nivel y orientado específicamente al violín, de la casa D’addario.

Clavijas de afinación mecánica Wittner

Es probable que hayas oído hablar de este tipo de clavija que, en principio, soluciona cualquiera de los típicos problemas que ocasionan las clavijas convencionales y que además permiten prescindir de microafinadores en el cordal.

Siendo así cabría suponer que todo el mundo las usaría, pero lo cierto es que, aunque siempre he oído hablar muy bien de ellas y me las han recomendado, yo aun no me he animado a montarlas, por el hecho de que requieran de un montaje por un luthier, o al menos por alguien con cierta habilidad y conocimientos. Estas clavijas vienen en dos diámetros, en función del tamaño de los agujeros de tu violín.

Soportes para violín

Aunque donde mejor está un instrumento es dentro de su estuche, a menudo debemos dejarlo un tiempo para hacer otras cosas, volverlo a dejar, etc., y andar metiéndolo y sacándolo todo el rato junto con el arco puede ser un incordio.

Para eso están estos soportes a los que puedes confiar tu instrumento sin miedo de que se caiga o dañe (salvo si le das una patada inadvertidamente o algo así). A veces tienen un complemento para el arco, con lo que la comodidad es doble.

Eso sí, hagáis como algunos guitarristas, que usan los soporte como ubicación permanente de su guitarra, el violín necesita mucha más protección así que usadlo sólo para periodos cortos de tiempo.

El que os traigo aquí, de Luthier Vidal, tiene soporte de arco y es plegable para un mejor transporte.