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Hola, hace un par de semanas me lancé y compré una viola Stentor Conservatorio de 15,5" y empecé a tomar clases con ella, sólo llevo dos clases, es genial, estoy aprendiendo guitarra clásica y piano desde hace casi tres años pero la viola es otro mundo. Es un instrumento extraño pero muy atractivo. No se que pasará. Saludos.
¡Hola udaimiel! Pues admirable tu decisión, por animarte a aprender y por escoger específicamente la viola, un instrumento fascinante que no se valora lo que merece, muy aconsejable para todos aquellos que prefieren un sonido más grave y menos brillante que el del violín. ¡Supongo que tendrás mucho tiempo libre para poder lidiar con tres instrumentos a la vez! en cualquier caso la experiencia con un instrumento ayuda con otros, aunque sean tan diferentes.
Bienvenido al foro y no te cortes en compartir lo que quieras o preguntar cualquier cosa.
Bienvenido.
Cada vez que alguien me comenta que eligió la viola, yo le pongo este video:
Que la disfrutes.
Creo que el Jennifer consigue expresar en este vídeo lo que se siente cuándo se escucha la viola y cuándo se decide que, a pesar de lo difícil y de lo extraño del instrumento, a uno le gustaría, al menos, aprender a expresar con ella la melancolía, la fuerza y a veces la alegría durante un segundo y luego descender a lo profundo de nuevo, temas sin florituras ni virtuosismo pero llenos hasta arriba de sentimiento. Tienes razón Frasco, este vídeo le hace un gran bién a todo el que empieza. Gracias. Un saludo.
P.D.: La sordina de las pinzas de madera de la ropa amortigüa bastante el sonido para porder tocar a horas no muy prudentes.
Perdona Jesús, ayer se me pasó agradecerte tu bienvenida. Primero fué la guitarra y tenía bastante tiempo para ella, luego el piano y ya tuve que organizarme el tiempo libre entre semana que no es mucho (el fín de semana sí dispongo de varias horas cada día). Ahora con la viola tengo una crisis de falta de tiempo, de momento, entre semana me preparo la clase que tengo con ella y el fín de semana repaso piano y guitarra para no perder al menos lo que tengo, a la espera de que se me ocurra algo... ya iré comentado cómo vamos en este foro. Gracias de nuevo y un saludo. Urbano.
Hola a todos.
Muy buen video, Jesús.
Un gusto leer a Zacarías y Udaimiel. Yo aprendo a tocar el violin hace un año (tengo 58) y estoy fascinada. Afortunadamente tengo tiempo asi que le dedico todos los días al menos una hora y he progresado mucho según mi profesora.
Muy linda comunidad esta, es bueno tener tantas opciones para aprender y compartir.
Saludos,
Soledad
Pues me alegra mucho ver a personas de su edad abriendose nuevos horizontes cuando la mayoria por desgracia empieza a cerrarlos para no volver a abrirlos...
Espero que disfrutes mucho del proceso de aprendizaje y que luches por tus sueños y metas que cualquier edad es buena para ser feliz y evolucionar.
Salu2!
perfecto
yo tambien ando con una viiola, y ya soy cincuenton.
Llevo tres meses con la viola y me ha enamorado, no tengo tanto tiempo libre como quisiera, así que tendré que robárselo a la guitarra y al piano, me he concedido un año para la viola en solitario. El tiempo dirá si ha merecido la pena esta decisión. Un saludo. Urbano.
A fecha de hoy llevo cuatro meses de clases y dos meses en solitario durante las vacaciones, ahora medio empiezo a encotrarme algo cómodo con la viola, es un instrumento (como todos, supongo...), muy exigente y que te rechaza si un día no has acudido a la cita, aunque sólo sea media hora para hacer una escala... intento escucharla para ver lo que me pide, buscar porqué me dá calabazas a menudo. Hay mucho camino por delante... y muy poco tiempo para desarrollarlo. Pero hay momentos de luz, emocionantes, que te dicen: "sí, has acertado, este es tu instrumento, él te dará lo que estás buscando" En esta vida sólo hay una manera encontrar algo que merezca la pena: matarse a trabajar para conseguirlo. Un saludo. Urbano.
Bueno, aquí seguimos, al día de hoy, ilusionados y en la brecha, la viola (en general todos los de arco, (y sé de cierto que el resto también, unos en mayor y otros en menor medida -a corto plazo-)) es un instrumento que te exige mucho y te recompensa... mucho. La posición exacta de los semitonos... la precisión en los cambios de cuerda, la falta de tiempo para posicionar los dedos con cierto orden... la rebelión de los músculos para gestionar una posición en el aire que acometa las cuerdas con un mínimo de fiabilidad... aúnque luego corrijas sobre la marcha... pero... quién dijo que fuera facil?, el resultado debe estar a la altura del esfuerzo, si no, que mérito tiene? Mi profesor es un santo varón que se se tiene el cielo ganado sólo conmigo. Un saludo a todos los penitentes del arco. Valor!
Este fin de semana, después de unas pocas horas de prácticas, la viola sigue chillando y negándose a dar una nota en su sitio, me asalta la duda: ¿que estoy haciendo? ¿estoy perdiendo el tiempo con un instrumento que no me devuelve nada a pesar de las horas que le dedico?. El piano hace meses que no le toco por falta de tiempo, cojo un ejercicio de los últimos que practiqué con él. Sonaba bién al tercer intento. Saco uno que no llegué a hacer, al poco, casi lo monto... y suena bién, me devuelve algo del esfuerzo... es música, no berreos... ???????
Un saludo amigo Urbano.
Ahora haces un año con la viola, un año. ¿Qué te dice tu profesor/a sobre tus avances?
Que es un instrumento ingrato creo que lo tenemos todos claro desde el principio, todos sabemos que si queremos un instrumento que al tocar "suene" y podamos hacer una melodía con un solo dedo elegimos la guitarra, el piano o el triangulo, jejeje.
Lo de si vale la pena o no lo debes contestar tu mismo. Cuando empezamos a aprender un instrumento a nuestras edades somos conscientes de que difícilmente llegaremos a concertistas, ni a que el dominio del instrumento vaya a ser completo. Mas que por "la llegada" a nosotros nos debe compensar "el camino".
¿sabes uno de los problemas del alumnado adulto para el estudio de los instrumentos de arco? (y lo digo siendo muy osado, porque ni siquiera te conozco, ni se como fueron tus avances , ni la dedicación que pusiste ni tus motivaciones), Los adultos tenemos una capacidad de autocrítica que no tienen los niños.
Si tu nieto de 5 años viene a casa tocando, como gato con la cola pisada, brilla brilla estrellita, o la granja de pepito, sin afinar una nota, sin coordinar dos arcadas a derechas y rechinando hasta destrozar los tímpanos... te lo mostrará orgulloso de sus logros ¡mira abuelo que bien toco! Si tu tocas brilla estrellita de forma sobresaliente, a nivel principiante, te esconderás en tu cuarto para que nadie te oiga. No nos conformamos con pasar el arco, queremos afinar, vibrar, dotar de expresividad, repartir arco, mantener fluidez y la armonía del primer violin de la sinfónica. Porque sabemos lo que está perfecto y lo que no lo está, pero no sabemos donde colocar el suficiente, así que nuestra autocrítica (y en ocasiones nuestro sentido del ridículo) nos pide ser mejores de lo que, por regla general, lo seria un estudiante que llevase el mismo tiempo que nosotros.
Compañero, yo soy luthier. Por mi casa pasan cientos de personas cada año y se ven cosas bastante curiosas. Autodidactas, profesores de conservatorio, chavales con pocos meses de aprendizaje y hasta miembros de alguna sinfónica. He visto "profesionales" que están de terceros y cuartos violines en orquestas tocar como para preguntarte ¿si tocan así cómo es posible que una orquesta suene tan bien? He visto concertistas tocar como los ángeles, músicos autodidactas estar a la altura de las expectativas... Lo que no he visto jamás es a un chaval de primero o segundo de conservatorio "tocar bien" Tocan como tocan, así que no desesperes y pregunta a los que te escuchan y te guían si vas siguiendo la progresión normal o si tienes que corregir algo en tu aprendizaje que te esté haciendo de freno.
Un abrazo y muchos ánimos.
Frasco.
Hola Frasco, gracias por tus palabras. La verdad es que escribí aquello en un arranque de frustración. Sí, llevo un año con la viola y mi profesor (que tiene más paciencia que un santo) me anima y dice que vamos bién, estoy con los dos últimos ejercicios del primer libro del señor Suzuki. Hay días... días que parece que ves la luz y otros que todo son sombras. Es un instrumento que aún sabiendo que es muy difícil, no te haces una idea del tamaño de la osadía hasta que no estás metido hasta el fondo. Es verdad que el piano, con el que me apaño tocando ejercicios sencillos a dos manos es mucho más amable. Empecé la viola por las infinitas posibilidades sonoras que tiene, lo rico que puede ser una interpretación. El sonido increible que emociona, los bajos... pero es un instrumento endiablado, no se deja querer. Sólo pretendo poder ejecutar cosas sencillas pero que suenen bién, que me den algo... a cambio del esfuerzo (una hora mínimo diaria y los fines de semana tres o cuatro cada día) Por eso, a veces tengo estas crisis de fe. Gracias de nuevo. Un saludo. Urbano.
Buenos días Urbano,
me da mucha pena lo que estás contando, yo no estoy de acuerdo en que la viola o el violin, ningún instrumento, sea "ingrato", o "endiablado", o "no se deja querer"... creo que estas cosas son meras proyecciones que hacemos los humanos sobre ellos... Sí estoy de acuerdo en que hay técnicas más complejas que otras, y por tanto para producir sonido cuesta más en unos instrumentos que en otros, exije más conocimiento y preparación pasar el arco y poner los dedos en su sitio para afinar, que tocar las teclas en un piano.
También creo que un año de práctica, y teniendo en cuenta que le dedicas muchísimas horas, ya debieran estar dando un fruto, algo debe estar yendo mal para que tengas esos sentimientos de duda y de fracaso...
Estoy de acuerdo con Frasco cuando dice que los adultos tenemos un nivel de autoexigencia que los niños no tienen, al menos en algunos casos, porque hay personas y personas, y nos diferenciamos también en eso, en lo que esperamos conseguir de las cosas que hacemos, he conocido niños muy perfeccionistas, y adultos a los que les da igual cómo hacen las cosas...
Por experiencia personal te puedo decir que se puede sacar un buen sonido desde el principio, y los alumnos principiantes que no lo hacen es porque no están bien asesorados por sus profesores, se tiende a ser muy permisivo con los que empiezan, pensando, bueno, ya mejorará, cuando yo creo que, sabiendo hacer las cosas bien, se puede y se debe afinar y sacar un buen sonido desde el principio, desde las 4 cuerdas al aire, para ir formándonos un buen criterio, desarrollando nuestra sensibilidad musical y nuestro amor por lo que hacemos.
Si sabemos cómo hacer las cosas, y no nos saltamos pasos...Si trabajamos la base técnica desde nuestro principal instrumento, que es nuestro cuerpo, aprendemos los movimientos básicos sin tensión y vamos dando estructura a las dos manos, entre otras cosas... Te propongo, si te parece bien, que compartas con nosotros un vídeo tuyo tocando,con un minuto es suficiente... es la única manera de poder ayudarte y asesorarte sin dar palos de ciego... ahí se verá la realidad, y tendrás la oportunidad de que más personas te asesoremos sobre tu forma de tocar. Además del violín, he estado varios años dedicándome a la viola, instrumento que adoro , son técnicas muy parecidas... Sin conocerte y sin escucharte, solo basándome en lo que cuentas y en mi experiencia previa, puedo imaginar un poco por donde está el problema, me aventuro a pensar que puede estar en la postura y en la estructura de las manos, sobre todo de la mano y dedos del arco, seguramente no relajas el peso del brazo sobre la cuerda, y no vibra bien, o se tuerce un poco el arco con lo que tampoco vibra bien ... pero si no te veo no lo puedo confirmar, quizá me equivoco...
Un saludo y mucho ánimo... recuerda que la música es un regalo, y está en todas partes. Descansa, disfruta de las pequeñas cosas, y piensa que no te estás jugando la vida, no hay un instrumento predestinado para cada uno...para mi un músico es el que consigue hacer música con cualquier cosa, y no se limita a un solo instrumento, porque, como bien dijo Jesús en uno de sus comentarios, cada uno te aporta algo y te sirve para los otros también... Ningún instrumento necesita de tu atención exclusiva, no son celosos jeje...Preguntate esto: ¿ qué prefieres, ser instrumentista o músico? Son dos cosas diferentes...
Para mí lo que importa es la música , y ya escuchando estamos aprendiendo... a veces conseguimos avanzar más descansando y dando un paseo, escuchando los sonidos de la naturaleza, que encerrándonos horas y horas en un cuarto, alimentando nuestra frustración ...
Un abrazo
Beatriz
Hola Beatriz, tengo en primer lugar, que agradecer tus palabras y tu interés. Yo tengo que elegir entre tres instrumentos que he empezado a practicar y que quiero que alguno de ellos al menos me acompañe hasta dónde pueda. No me hago ilusiones de virtuosismo ni de proyección social ni profesional, evidentemente. Es un puro interés personal. Empecé con la guitarra clásica, luego añadí el piano y, por fín la viola. Los tres me encantan, me emocionan y me gustaría poder expresarme con alguno de ellos aunque fuera tan sólo un poquito. De los tres, el que me resulta menos difícil es el piano en el que me desenvuelvo con cierta comodidad, la independencia de manos y la lectura de dos partituras de forma simultánea no me resulta tan árdua como la habilidad manual necesaria para las cuerdas, tanto pulsadas como frotadas. A mi edad el tiempo es importante, tengo que decidir con quién voy a pasar el resto de mi vida... y tengo que elegir bién. Es una decisión que hay que tomar con la razón, no pueden ser los tres, ni dos siquiera. Ese es el problema. No depende de la orientación de mi enseñanza de la viola, mi profesor es impecable y capaz sin duda alguna para ejercer esa función, es exigente pero comprensivo, me guía y me aprieta hasta dónde debe hacerlo, pero no afloja tampoco. He dirigido actores y sé hasta dónde se puede llegar y de dónde no se deber pasar si no quieres romper algo. La capacidad o no de tocar este instrumento es sólo mía. Como dije, hay días que me llenan de esperanza con la viola y otros en los que no veo ni torta ni con linterna. Un abrazo y gracias. Urbano.
Poco más puedo añadir a lo contado por Bea y Frasco, sólo transmitirte mi comprensión, porque muchos sentimos a veces que estamos atascados, que no avanzamos, aunque suele ser una impresión negativa de falta de perspectiva. Si quieres sentir cómo era cuando empezaste a tocar, y lo que has avanzado, coge el violín, cámbiale la posición de la almohadilla y póntelo en el lado derecho, cogiendo el arco con la izquierda, intenta tocar algo. Horrible ¿verdad?
Cierto que un instrumento de cuerda frotada requiere, en mi opinión, más trabajo para extraerle su jugo. Aunque a mí particularmente es lo que me motiva más.
Recientemente, en un grupo con el que he tocado el violín en un par de temas, me dijeron que por qué no tocaba el bajo (estaban sin bajista) y yo pensé, caray, si no tengo ni idea, no he tocado un instrumento así en mi vida, apenas hacer el tonto con una guitarra, pero lo probé y en realidad me ha parecido un instrumento bastante sencillo para "aparentar que sé tocar". Aunque no tenga ni idea, puedo acompañar al grupo de forma eficiente después de un par de días de estudiar los temas, sin haber cogido un bajo en mi vida, y eso es impensable con un instrumento de cuerda frotada.
Pero también quizás eso es lo que hace que me guste tanto mi violín, al principio pensaba: a ver cuánto tardo en aprender a tocar, hasta que vi que eso de "ya sé tocar" no lo iba a pensar nunca, (quizás los profesionales sí lo piensen) porque siempre hay cosas que aprender o mejorar, nunca he sentido que había llegado a la meta, sólo a pequeñas metas volantes, a esquivos momentos de satisfacción y comunión con el instrumento, junto a muchos otros de trabajo, esfuerzo, desánimo, ilusión, hastío, ansiedad, enfín, un vaivén de vivencias, unas más dulces que otras, pero todas enriquecedoras, como las que tiene cualquiera en una relación de pareja (cuando hay amor claro). Por eso me ha llamado la atención tu frase de "tengo que decidir con quién pasar el resto de mi vida", es cierto que hay un poco de eso en nuestra relaciones con los instrumentos.
Yo no te puedo decir cuál debes elegir, en realidad ya has elegido la música, la interpretación; el instrumento es secundario y es algo absolutamente personal en la que, aunque la razón tiene mucho que decir, es más sabia la intuición. Pero sobre todo, elijas lo que elijas, no pienses en términos de haber fracasado o no, simplemente son caminos que se bifurcan, y hay que escoger para seguir avanzando.
Un abrazo y gracias por compartir tus sentimientos.
Hola Jesús, sí, he probado y comentado la prueba de tocar con las posiciones invertidas y, desde luego, es la prueba del algodón, nos reímos a gusto (en mi clase), una ocurrencia excelente, gracias. Ayer le comenté a mi profesor lo que había sentido estos días "aciagos", que antes de ir a clase había hecho ejecicios de piano porque si la viola se me torcía, me remataba. Me dijo simplemente algo así cómo: "bienvenido al club", eso nos pasa a todos... muchas veces. Hablamos un ratito y empezamos a trabajar, después de un ejercicio un poco árido que no me salía sino horrible (estaba bastante desconcentrado), con las manos llenas de dedos como morcillas y con menos reflejos que una palangana, propuso un trocito del otoño de Vivaldi divertidisimo que tocamos juntos, él con violin y yo con la viola. Con los forte y los pianos y a una velocidad, para mí, endiablada. Me lo pasé tan bién que me subió la moral treinta enteros. Adoro la viola, si consigo sacarle un mínimo de ese sonido que tanto aprecio seré el más felíz del mundo, si nó, tendré que buscar un camino alternativo. Sin música no pienso quedarme. Gracias Jesús por tus palabras que son de gran ayuda. Un abrazo. Urbano.
Acabo de encontrar una sordina que me sirve. Probé con pinzas de la ropa de madera (más masa), una o dos, en el puente arriba o abajo, se comían todos los agudos. Las que van entre dos cuerdas, de goma... no hacen nada. La de goma gorda (en la foto), es a tope, pueden estar durmiendo todos y no se enteran que estoy tocando, lo malo es que yo tampoco... se come todas las vibraciones. Buscando el punto intermedio, que es dónde está la virtud, he probado con unas pinzas que compré en el chino para otra cosa y... premio! la viola vibra y suena, pero no molesta... de momento es una solución para tocar en casa con soltura sin tener que imaginarse cómo suena de verdad. Para quién le pueda servir... Un saludo. Urbano.
Esta viola, o mi aún primitiva forma de tocarla, se ve beneficiada por las pinzas del chino... sin nada me suena basta... a cartón piedra... bronca... con la sordina de goma, demasiado fina y apagada, muerta. Con las pinzas metálicas (les he quitado el recubrimiento de goma original con un cútex), mantienen una vibración amortigüada pero suficiente y reducen el volumen, creo que lo suficiente, para poder practicar con gente en casa. Me gusta cómo suena así. Un saludo. Urbano.