Seleccionar página
Hola a todos:
Hoy me gustaría compartirles una preocupación que me ha puesto muy triste y no sé si sea tan grave (o sólo está sobre-dimensionada).
Verán hace poco (unos dos meses) reinicie mis clases de violín. Tuve que dejar mi primer escuela y tardé tres meses en encontrar otro sitio lo cual me llevo algo de tiempo que desafortunadamente se tradujo en tiempo muerto para mi instrumento y para mi. Ahora me arrepiento porque no sé si desde ahí comenzó a gestarse el problema que les expongo.
Mi nuevo maestro es un buen músico y muy paciente, aprecio mi academia y a mis compañeros... pero hace poco mi maestro me dijo "Esme ¿que pasa? Le tienes un miedo tremendo al violín y a la pieza. Temes echarla a perder, no te arriesgas." Agregó " No quiero pensar que pasaría si algún día te llevó a un concierto" (está en una orquesta y su Director le concedió el permiso de llevar a sus alumnos si estos alcanzan un nivel aceptable) Y eso me dejó pensando...
Practico diario una hora o dos, me agrada mi maestro y el ambiente en el que estudio no es hostil, amo mi violín, entonces ¿que sucede? No entiendo si este es el resultado de ese tiempo en que permanecimos de holgazanes mi instrumento y yo, si es mi culpa y el maestro tiene razón (después de todo no tendría porque mentirme), si debería estudiar más, si tengo miedo a la pieza o al violín (o a los dos) y por qué. Me puse triste porque a mi si me encantaría ir a un concierto (dos de mis compañeros ya fueron y por lo que platican les fue muy bien) pero...ahora ya no sé que pensar o que hacer.
Ustedes ¿se han sentido así? ¿ es normal sentirse asi en esta etapa del estudio o no? ¿Que me recomiendan?
Gracias por atención y por sus amables respuestas. Espero no haberlos aburrido mucho.
Un saludos desde México :) Esme
Nuestro carácter se refleja en cómo tocamos. Más que miedo al violín lo que tendrás es miedo al error. Eso puede ser normal al principio, sobre todo si ya tienes cierta edad y una mayor conciencia de ti mismo. Los niños suelen tocar sin preocuparse demasiado de lo que pensarán los demás, y esa es una de las cosas que deberíamos imitarles. No sé cuánto tiempo llevas tocando, si no es mucho no creo que debas preocuparte, puede ser simplemente que estás más pendiente de la corrección que de la expresión.
Lo que no debes pensar es que "hay algo mal en mí que no me permite tocar bien". Esos pensamientos negativos son peores que las posibles carencias o defectos técnicos. Enfréntate de forma positiva a las piezas, puede ser una buena idea intentar practicar tocándola fortissimo, hasta que chirríe incluso, otras veces rapidísimo, otras pianissimo, otras muy lento, sonará bastante mal pero así empezarás a perderle el miedo que probablemente te encoge el brazo y te impide tocar con naturalidad.
Imagínate con rabia, y toca. Imagínate enfadada y toca. Imagínate inmensamente feliz y toca. Imagínate asustada y toca. Busca expresar en la forma de tocar esas y otras emociones que se te ocurran, pensando en expresar lo que sientes aunque te equivoques.
Lo cierto es que no somos máquinas, y el violín refleja cómo somos (aunque cada vez más los intérpretes son más técnicos y menos personalmente expresivos). Vengerov toca de una manera por su carácter fuerte e impetuoso, Itzhak Perlman es más dulce, Nigel Kennedy fogoso, etc.
Ánimo y no te agobies, poco a poco te irás soltando, e irás teniendo más confianza en ti misma.
Nada que no sea normal.
Hay un fenómeno que yo llamo "la maldición del REC" y la explico con las grabaciones en video o audio. Puedes estar practicando la pieza dos horas y que te suene sublime, tus manos ágiles, tu atención despierta, la ejecución a tempo y armoniosa, sin olvidar la expresividad...
¿la grabamos? Dele, ahora.
Es pulsar el botón del REC y tus manos serán torpes, tu confianza flaquea, incluso se te olvida la partitura en algún pasaje, te aceleras y fallas.
Es la maldición del rec.
Es como cuando aprendes una nueva pieza y ya te suena decentemente. Si llamas a un familiar para enseñarle tus progresos volverás a ser principiante, como si no hubieras estudiado hasta ahora esa melodía, jejeje. Entonces piensas, sólo, encerrado en mi estudio, cuando nadie me oye toco bastante mejor.
Sufres la maldición del rec.
Llevas estudiando toda la semana, ya te salen bien las arcadas, prestaste atención a todo lo que te dijo el profe, ahora lo tienes delante, es la hora de demostrar que no estuviste haciendo el vago en los últimos días. Tocas y pareciese que fuiste de vacaciones y olvidaste el violín.
Te atrapó la maldición del rec.
¿Es un problema de tensión nerviosa, de respeto, de miedo al fracaso, de autoexigencia, de falta de confianzaen ti o en los demás, de vergüenza, de autoestima?
Supongo que en cada caso tendrá una componente distinta.
¿cómo solucionarlo? relativizando la situación.
Un profe no se enfada si fallas, no se rie de ti cuando no sabes, sino que te enseña. Nadie espera de ti que te conviertas en concertista de la noche a la mañana. Si hiciste tus deberes, concédete permiso para no ser perfecta.
Sé que es dificil disfrutar de los estados de tensión, pero es una faceta más del instrumentista. La adrenalina, de nervios, de miedo, de respeto, ante una actuación con un auditorio desconocido puede ser adictiva, como lo es cuando se practican deportes de riesgo.
No te plantees metas lejanas, acerca tus metas, desmenuza tus grandes retos con el violin en miles de pequeños hitos a superar. Todo te será más fácil.
Un saludete y muchos ánimos.
Todos tenemos altibajos, bloqueos, periodos en que percibimos falta de avance... No creo que sea una cuestión de haber pasado tres meses sin tocar, con tu ritmo de práctica habrás superado hace semanas el nivel que tenías cuando dejaste tu antigua escuela. ¿Puede ser que no te sientes identificada con la pieza o las piezas que estás ensayando? Aunque estemos aprendiendo, somos músicos, y lo que nos mueve es nuestro "corazón musical"... si no late con la música que estás tocando... bueno, todo saldrá plano, sin emoción, sin riesgo, sin valentía.
Aparte de los sabios consejos de los compañeros, pide a tu profesor que haga hueco en las clases para que practiquéis alguna pieza nueva que te guste especialmente (del estilo que prefieras). No sé si él toca contigo en las clases, o si son en grupo, pero también podría ser una buena idea ensayar alguna pieza con otros alumnos de la escuela.
¡Saludos y ánimo!
Hola:
Mil gracias por sus consejos. Los podré en practica y ya estaré por aquí contando como me ha ido :)
Es bonito tener compañeros como ustedes en esta aventura musical que es aprender a tocar el violín
Saludos :). Esme
Las palabras de Frasco me hacen mucho sentido y me siento muy identificado con el tema de "la maldición del REC".
He tocado guitarra en público y me sucede lo mismo, es nerviosismo o no se que, donde de pronto te quedas en blanco y hasta los compases que vienen se te olvidan como si hubiesen venido los Man in Black a flashearte la mente.
Al grabar ocurre lo mismo, muchas veces un tema que parece muy simple me toma mucho tiempo poder grabarlo, pues basta ver la lucecita roja de la grabadora para que mi estado cambie.
Sin embargo, eso es trabajable. Más que nada es nerviosismo, y todo el mundo ha pasado por ello. Incluso cantantes de renombre han sufrido el olvido momentáneo de la letra que interpretan, demostrando así que todos somos vulnerables.
¿Cómo trabajarlo?, pues enfrentándolo. He tomado por costumbre en cada reunión familiar, llevar conmigo el violín o la guitarra y regalarle a mis seres queridos algún ratito de música, para tomar por costumbre tocar en público y relajarse que es lo que hace falta.
Practica, practica, practica y practica....y cuando creas que estás list@, entonces vuelve a practicar. Grábate, con el móvil, con grabadora, o filmadora que eso hace muy bien, para tomar por costumbre poder interpretar con algo que te ponga nervioso, y además, para poder luego oir que tal lo hiciste y fijarte en los errores que cometiste para poder corregirlos en el futuro.
Tómatelo con relajo, y no rechaces ofertas para tocar con amig@s, y con tu profesor, que eso hace muy bien.